Pese a tener un nombre amenazante todo el barrio adoraba sus chascarrillos y buenas maneras. A todo aquel al que preguntes te dirá que, cuanto menos, era un tipo muy agradable.
Pero un buen día internet se cruzó en su vida... no, no es que "Animal" chateara como un loco, o se gastara todo su pienso en jugar al poker online, no.
Todo comenzó cuando una mañana "Animal" decidió perseguir a un gato al que se le había caido el tabaco, siempre fue buena persona.
El gato aterrado huía de "Animal"... y es que pese a todo "Animal" era un perro y todo gato sabe que los perros no son de fíar.
"Animal" alcanzó al felino e intentó devolverle su paquete de Ducados, pero el salvaje minino le atacó enfurecido sin dar la menor oportunidad al cánido que no tuvo tiempo de reacción.
Todo habría quedado en una pequeña trifulca si no hubiera pasado por allí un corzo con un teléfono móvil con técnología 3G (Maldito 3G).
El corzo publicó la foto de más abajo en su blog con el título nada elocuente "Gato apaliza a perro flojeras". La foto se convirtió en una bomba que pasaba de ordenador a ordenador. Cuanta más gente veía la imagen mayores eran las carcajadas y burlas que "Animal" soportaba por la calle.
La foto de la perdición es esta:
"Animal" no pudo soportar la verguenza y despareció.
Muchos creen que ha muerto, pero los que le conocimos y admiramos pensamos que está en un lugar mejor, donde internet no pueda destruir su reputación. "Animal" es perro de tiro en el Polo Norte
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