La segunda aventura cinematográfica de los hermanos Pavensie está basada en el cuarto libro de la saga de C.S. Lewis. En ésta, los hermanos vuelven al maravilloso reino de Narnia pero más de 1300 años después de la anterior visita.
La historia comienza cuando el príncipe Caspian, heredero del trono Telmarino, huye de noche hacia el bosque. Está siendo perseguido por los hombres de su tío, éste pretende terminar con su vida para “colocar” a su hijo recién nacido en el trono.
Las cosas se ponen feas para Caspian que se ve obligado a hacer sonar un ancestral cuerno mágico. La llamada hace que los cuatro hermanos Pavensie se materialicen desde el metro de Londres a las playas del antiguo reino de Narnia.
Los Pavensie se encontraran con una nueva realidad y es que los seres mágicos de Narnia se han visto obligados a esconderse en los bosques y el que en tiempos fue en un mágico reino es ahora el dominio de los Telmarinos (seres humanos).
La primera película de “Las crónicas de Narnia” me pareció bastante ñoña y sosa, pero esta segunda es mucho más adulta y entretenida.
Disfrutaremos de un montón de batallas, duelos a espada y chascarrillos de esos que hacen a los niños partirse de risa.
El bueno de Caspian tiene un alto protagonismo durante la primera parte de la película, pero en la última parte casi desaparece por completo y cede el merecido protagonismo a los hermanos.
La verdad es que la peli tiene bastante violencia pero por supuesto la han adaptado para que los más pequeños no se den cuenta de nada. (Es en la primera película en la que se representa una auténtica masacre sin que se derrame una gota de sangre).
Un ejemplo es la escena que Disney obligó a volver a grabar en la que una espada cercena el cabezón de un hombre pero al siguiente plano se ve perfectamente como solo el casco cae al suelo, el casco sin nada dentro por supuesto.
Para aquellos a los que les guste el cine fantástico con ciertos tintes épicos “Las crónicas de Narnia: El principe Caspian” es un excelente entretenimiento para disfrutar del aire acondicionado de una buena sala de cine.
Si os gustó la primera parte, esta segunda os encantará, la taquilla dirá si hay tercera parte, aunque yo apuesto que sí.
Le doy un 6,5 sobre 10. PURO CINE PALOMITERO.
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