La semana pasada nada más terminar El Guardian entre el centeno, empecé este libro con este título tan original. Y es gracioso, porque al igual que la novela de Salinger, está narrada en primera persona y por un adolescente de unos 15 años. Pero a pesar de esta coincidencia (y de ciertos toques de critica social), no podría ser un libro más diferente.
Publicada en el año 2003, esta novela escrita por el britanico Mark Haddon cuenta la historia de Christopher Boone, un chico de 15 años medio autista, superdotado para las matemáticas, con memoria fotográfica, maniático e incapaz de mentir, que vive con su padre y con su rata Toby. Un día descubre que el perro de la vecina ha sido asesinado y siendo fan de Sherlock Holmes se dispone a averiguar quién es el asesino y para ello comienza a escribir un libro.
El libro me ha parecido muy original (los números de los capítulos son números primos; está lleno de dibujitos y explicaciones a problemas matemáticos) y muy entretenido, tiene poco más de 200 páginas y se lee en un suspiro. De hecho, me quede con más ganas de seguir leyendo las aventuras de un protagonista tan peculiar.
Rubén
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