He tardado un poco en escribir esta crítica porque no quería hacerlo muy en caliente. Después de tanta anticipación, tras verla por primera vez, si hubiera escrito algo, hubiesen sido frikeces de este estilo: “es la mejor peli de superhéroes de la historia; la peli del año; una de las mejores de la decada; una de las grandes secuelas de la historia (junto con El Padrino II y El Imperio Contraataca)...”. Después de haberla disfrutado por segunda vez, todos esos calificativos son insignificantes. Porque El Caballero Oscuro es para mis ojos, una obra maestra.
En este blog ya se ha usado esta palabra antes. Para Dani, tanto Ratatouille como Wall-E lo son. Aún no he visto las andanzas del simpático robot de Pixar, aunque estoy seguro de que serán magistrales, y Ratatouille me pareció una muy buena peli, pero eso de obra maestra son palabras mayores para mi. Este calificativo solo lo veo digno de pepinos tipo El Padrino, El Apartamento o Toro Salvaje. ¿Por qué digo entonces que TDK es una obra maestra según mi humilde opinión? Pues porque ante mis ojos todo funciona a la perfección; todo es genial (guión, dirección, personajes, actores, montaje, fotografía, sonido, música...); y porque disfruté enormemente de cada segundo de los “cortos” 150 minutos que dura esta maravilla.
TDK no es solamente una película de superheroes o de acción. Es un drama criminal de suspense a la altura de los grandes del género (Heat, Los Intocables, Infiltrados...). Podría empezar a hablar de lo redondo que es el guión; de la complejidad de los personajes; de la interpretación de los actores (todos geniales, lo de Ledger es increíble); de las espectaculares escenas de acción (el atraco al banco, el secuesto en Hong-Kong, la persecuión del furgón, la batmoto... y por fin vemos a Batman repartir estopa de verdad); de la angustia que pase en su primer visionado... Pero la realidad es que adoro cada plano, cada sonido y cada minuto de esta película. Batman Begins era ya una de mis películas favoritas, pero es que su continuación es El Imperio Contraataca de esta saga: más grande; más épica; más espectacular; más oscura; más personal y emotiva; y encima, acaba mal. ¡Vaya final! Pocas veces se me ha puesto la piel de gallina asi en un cine. Y muchas menos veces he salido tan satisfecho de una sala y con tantas ganas de volver a ver una peli (de hecho lo hice al día siguiente...).
Sólo me queda decir que Nolan es DIOS. ¡Pedazo cineasta! Lo que ha hecho este tio con Batman no tiene nombre. Además, se vuelve a demostrar que se puede hacer buen cine de entretenimiento. Se me quedan unas ganas terribles de ver la siguiente parte de esta historia, aunque veo muy dificil, por no decir imposible que la tercera parte supere a El Caballero Oscuro, pues esta película para mi, es casi perfecta.
NOTA: 5 estrellas
P.D.: la primera vez que doy esta nota a una peli, y lo hago porque creo que se lo merece. Ya de por si un éxito tan grande (de crítica y económico) es por algo. Pero sinceramente pocas veces he visto una peli que me haya gustado tanto y que me parezca tan soberbia en todos los aspectos.
Rubén González
WALL-E 6/8
